miércoles, 24 de junio de 2009

Weekend con bichejos en la ribera Navarra


Siempre es un placer hacer una escapadita de fin de semana a Navarra, y más si es para visitar a la familia. Lejos de la ciudad, los paseos por el campo revelan una actividad extraordinaria en primavera; las flores aparecen allí donde haya un poco de agua junto con patos, garzas, cigueñas... Una carpa salta fuera del agua mientras saco esta fotografía y me pega un buen susto; por poco no me voy al agua con cámara y todo.
Ya en tierra firme y con el fuerte cierzo que no deja de menear las hierbas las libelulas azules de la laguna son difíciles de fotografiar, pero esta ha decidido ser paciente conmigo y me regala este bonito contraste con la flor de fondo.


La carretera me acompaña de vuelta a casa. Siempre hay un momento para coger la camara y retratar el atardecer.





martes, 16 de junio de 2009

Mister Dinamita



Curiosamente tengo pocas fotografías de este espectacular conciertazo del señor Brown... me lo pasé bailando, como todo el mundo!
Añado una breve reseña del concierto escrta por J.C. Andrés.

"El público del Jazzaldia donostiarra pudo comprobarlo el 29 de julio de 2002 en la Plaza de la Trinidad, donde el legendario Mr. Dinamita -otro de sus múltiples apodos- disipó cualquier rumor sobre su supuesta decadencia artística. Su actuación, una magistral lección de soul, funk y rock, sirvió para clausurar por todo lo alto el XXXVII Festival de Jazz.
Tras el habitual intermedio, los casi 4.000 espectadores que abarrotaban la plaza vieron entre divertidos e incrédulos cómo una docena de músicos ataviados con uniforme rojo irrumpían en el escenario. Mientras sonaba una especie de medley de presentación, un tipo enclenque que hacía las veces de maestro de ceremonias invitaba al público a llamar al "rey" a voz en grito. Y el monarca apareció en escena, con un pelucón ondulado y embutido en un hortera traje negro de flecos y lentejuelas, con pintas de dirigirse a Las Vegas para participar en una boda express. Desde el principio, el ejército musical de Brown -tres guitarras, dos bajos, dos baterías y una generosa sección de viento- escupió un sonido arrollador que hizo danzar como posesas a las dos bailarinas invitadas para la ocasión.



Después, puesto de rodillas, interpretó uno de sus mejores temas, It's a man's man's man's World . Pero poco duró la calma. De inmediato invitó al público a bailar frenéticamente al ritmo de I feel good . El éxtasis fue aún mayor cuando el público reconoció los primeros compases de uno de los mayores éxitos de Brown, Get Up (I feel like being a sex machine ). Fue el incendiario broche de oro a una noche irrepetible en la que pocos daban crédito a lo que acababan de presenciar."

Las dos imágenes que aquí presento muestran dos momentos significativos del concierto; en la primera las bailarinas danzan desbocadas mientras el abuelo Brown no pierde detalle... en la segunda el maestro de ceremonias ha resguardado entre canción y canción al rey del soul con su capa de lentejuelas.

James Brown contaba 69 años cuando dio este concierto, falleciendo cuatro después a la edad de 73 años. Brown nunca dejó de actuar ni de prestar servicios a la comunidad. Sólo tres días antes de su muerte, se sumó a un grupo de voluntarios en la entrega anual de regalos navideños que él organizaba en Augusta y tenía planes de presentarse en Año Nuevo en el club de B.B. King en Nueva York.
Todo un fenómeno de la naturaleza.

martes, 2 de junio de 2009

Delirio nº3, "El desnudo"

"Zurriola desnuda"

"El calor de la mañana disipa la niebla tras una noche de mar de fondo. Furtivo, en comandita con la luna, Poseidón ha reclamado sus derechos entre sábanas de espuma en la oscuridad.


Su nombre es Zurriola y a menudo regreso a ella para buscar la sal de la vida. Caprichosa como es, desvergonzada, libre e indomable muestra con humildad y poderío sus encantos y de paso nos recuerda que antes, mucho antes, fuimos peces; y que si bien hace millones de años que como especie abandonamos el medio salado, tan sólo hace una vida que nacimos en sus orillas.


Una playa no es una mujer desnuda, pero se le parece mucho."



La revista on-line "Delirio nº3, el desnudo" me invitó hace unas semanas a participar con ellos de su tercera entrega. Por supuesto acepté encantado. Quiero hacer llegar mis más sinceras felicitaciones para Aída García Corrales, Oscar Varona y Paco Martos, artífices de esta brillante publicación por su desinteresada entrega y su titánico esfuerzo.


Para delirar con la revista pinchar aquí.

Un fuerte abrazo.